En verano muchas personas aumentan entre 2 y 3 kilos de peso de media. Es importante estar concienciados de que los buenos hábitos en el momento de cuidarse y comer deben mantenerse durante todo el año.

En verano nos relajamos y muy a menudo se olvidan los alimentos y los hábitos que son perjudiciales. Posteriormente esa dejadez, aunque es pasajera, se nota en la ropa interior y en la salud, lo cual es mucho más importante que una cuestión estética. Comer fuera de casa sin tener en cuenta que en bares y restaurantes suelen servir comidas con más grasa, no hacer actividad física, ingerir más bebidas alcohólicas o con gas de las que habitualmente se consumen y los trastornos intestinales que el verano conlleva muchas veces hace que se gane peso rápidamente. Todo el esfuerzo o el mantenimiento que se ha realizado durante el invierno para poder lucir la ropa de baño puede irse al traste en un mes.

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Engordar rápidamente es tan perjudicial como adelgazar en poco tiempo, y estos cambios en el cuerpo se suelen dar durante el año cuando no se toma consciencia de que las variaciones de peso influyen en la salud. Del mismo modo que no se debe esperar a unos meses antes del verano para empezar a cuidarse tampoco se han de perder los buenos hábitos pensando en que tras los meses de calor el cuerpo volverá a perder esos quilos de más. Si se aumentan unos quilos de peso y después se pierden rápidamente se reduce masa corporal y el porcentaje de grasa es mayor. Con el tiempo se ganará peso más fácilmente.

Qué hacer para no engordar en verano

Aunque pasado el verano se piense que ya no tienen importancia esos quilos de más pues ya no es necesario utilizar un bikini o bañador lo cierto es que al verse en ropa interior sí cobra importancia para algunas personas ese cambio en su cuerpo. Para evitar esa situación es recomendable:

  • Evitar el alcohol en exceso.
  • Comer frutos secos entre horas si se tiene hambre.
  • Comer alimentos que ayudan a quemar la grasa.
  • No beber en exceso refrescos con azúcar.
  • Preparar bocadillos con pan integral si se va a comer al aire libre.
  • Pesarse regularmente para llevar un control.
  •  Aprovechar esos días de ocio para hacer algún tipo de ejercicio, como caminar o nadar.