Consejos para cuidar los pechos durante el embarazo y la lactancia

Cómo algunas de vosotras ya sabréis, nos encontramos en la que éste año se ampara bajo el lema: , y que tiene lugar desde el 1 al 7 de agosto de 2014 en numerosos países del mundo.

Cómo algunas de vosotras ya sabréis, nos encontramos en la Semana Mundial de la Lactancia Materna que éste año se ampara bajo el lema: Lactancia Materna, un triunfo para toda la vida, y que tiene lugar desde el 1 al 7 de agosto de 2014 en numerosos países del mundo.

Un movimiento que aboga por alimentar con leche natural a los bebés durante el mayor tiempo posible por motivos de salud y que nos plantea a muchas el siguiente dilema:

¿Cómo dar lo mejor de mí a mi bebé sin que después me pase factura?

Y es que son muchas las mujeres a las que amamantar a sus bebés les afecta en la forma y firmeza de sus pechos, haciendo que nunca vuelvan a ser los mismos tras un embarazo y una posterior lactancia.

Por eso hoy, queremos ayudaros y daros algunos consejos y recomendaciones a seguir durante el embarazo y la lactancia  para que tus pechos sigan estando exactamente igual tras éste período dónde los cambios físicos y hormonales son muy grandes:

Cuidar tu pecho durante el embarazo y la lactancia:

– Utiliza crema anti-estrías: para mantener elástica la piel de esa zona y disminuir las probabilidades de que aparezcan las llamadas estrías es muy conveniente utilizar una crema con suaves masajes, desde afuera hacia adentro, siempre igual sin incluir los pezones. Un ejercicio que ayuda tanto a renovar la piel como a estimular la circulación sanguínea. Se puede utilizar para ello cualquier tipo de crema, aunque es cierto que las más recomendadas son las denominadas cremas anti-estrías o cremas de colágeno una vez al día (repitiendo dos veces al final del embarazo).

– Utiliza sujetadores maternales: desde los primeros meses de embarazo y durante toda la lactancia es de mucha importancia utilizar sujetadores maternales. Lo ideal es que sean de algodón y cuenten con tirantes anchos y adaptables a los cambios de volumen tan frecuentes en ésta época.

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Sujetador maternal de lactancia sin aros, especialmente indicado para dar el pecho

– Aplica frío en la zona del pecho: un remedio tan casero como efectivo es la utilización de compresas mojadas, que ayudan a tonificar la figura y el busto.

– Duchas de agua fría: otra buena práctica es terminar la ducha con agua fría para fortalecer los tejidos mamarios.

– Mantén buenas posturas: es aconsejable mantener la espalda recta y la cabeza alta ya que los hombros hacia adelante provocan la caída de los pechos. Evita los sostenes pequeños que comprimen el pecho y no duermas boca abajo demasiadas horas.

– Practica ejercicios: mantén firme esta zona de tu cuerpo con algunos ejercicios específicos como extender los brazos al frente y cruzar los brazos en movimiento de tijera o con los brazos en cruz girar las manos en círculos. Lo importante de estos ejercicios es mantener la espalda recta, el estómago sostenido y los glúteos contraídos.

– Evita los deportes de riesgo: intenta evitar realizar deportes que requieran mucha actividad física aunque sí eres amante de la actividad física los efectos se reducen mucho al utilizar sujetadores deportivos

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Sujetador Unno Smart Confort ideal para practicar deporte

– Amamanta seguido a tu bebé: realiza una higiene diaria con jabones que no provoquen sequedad en los pezones ni en su contorno para sí prevenir grietas.

En definitiva, unos pequeños consejos que seguro que te servirán y que harán que el paso por un embarazo y un parto no se noten en tu cuerpo, excepto por ese pequeñin que llevarás al lado 😉

¿Y vosotras, tenéis algún truco más para compartirlo con todas nosotras?